La protección de la maternidad es un derecho laboral fundamental y un elemento crucial para garantizar el trabajo decente y la productividad de las mujeres, así́ como para lograr la igualdad de género en el trabajo. Este derecho, que ha quedado consagrado en tratados universales fundamentales de derechos humanos, contempla entre sus elementos principales una licencia de maternidad no inferior a las 14 semanas, protección frente al despido en caso de embarazo o maternidad, la reducción y la interrupción del tiempo de trabajo remunerado para la lactancia y el pago de las licencias de maternidad por parte de la seguridad social para evitar fuentes de discriminación indirectas.